LA LOCURA Y LA PAZ (Vals) Vestía trajecito sastre Usaba rodete y lentes de alambre. Sabía, de la Biblioteca Todos los autores, todos los estantes. A veces eran sus mejillas Dos soles de arcilla, bajo el colorete. La misma rutina sencilla: Entraba a las nueve, salía a las siete. El mundo de la Biblioteca Fue como la réplica de su santuario. El viejo perfume del tiempo Y el mismo vetusto, silencio de siempre. Un día, vino un hombre joven Le pidió un volumen de universitario. La mano le rozó su mano... Y fue un torbellino que arrasó su mente. Una tarde, una vez Sin saber cómo fue, Se encontró, sin querer Al desnudo con él. Fue su libro mejor Y aprendió a releer, El amor... Manuscrito en la piel. Un día, repasó su vida Le pidió a la almohada, que no le mintiera. Entonces revisó la cuenta: Él con diecinueve y ella más de treinta. Se fueron a aclarar las cosas A la luz del día, en un bar cualquiera. Le dijo que no seguirían Que le agradecía tanta primavera. Hoy es una mujer distinta Se arregla, se pinta, no lleva rodete. El viejo trajecito sastre Quedó en el pasado, como los juguetes. La vieras, los cabellos sueltos La blusa atrevida, la falda de rojo. Qué vuelco le ha dado la vida Tan bien parecida que alegra los ojos. Una tarde, una vez Sin saber cómo fue, Se encontró, sin querer Al desnudo con él. Fue su libro mejor Y aprendió a releer, El amor... Manuscrito en la piel. Ahora es una mujer Sensitiva y total, Ya vivió La locura y la paz... Encontrar el amor, es vivir la locura... Vivir el amor... es encontrar la paz... Letra: Juanca Tavera (Juan Carlos Moscón) Grabado por Guillermo Galvé con el acompañamiento de la orquesta dirigida por Osvaldo Tarantino. (Letra obtenida de la grabación)