Entre sístoles y diástoles. Albores de una vida. Cerca de la catástrofe, ya dada por perdida. Se impulsan brúscamente para saciar su hambre, Palpitaciones cósmicas que crean mares de sangre Recogidos torpemente por un recipiente esférico E histérico por un sufrir galáctico y por un dolor dinámico. Sus profundos estrépitos remueven las galaxias. Es un caos ordenado con una brutal apraxia. En el interior de una esfera vital comienza a vibrar su entraña. Forja simas profundas donde abarcará su totalidad con plasma. Él en si mismo suma la divinidad y la moralidad del Cosmos. Es una estrella pura. Un gigante acorazado por una osamenta. Una membrana plasmática cubre las tormentas De asteroides, cometas, y meteoros. Un geoide que custodia su gran tesoro. Grandeza que está fuera del espectro de colores. Gira en su órbita. Se impulsa por temblores. Los factores que lo inducen a la vida son ilógicos. Siéntense, observen un prodigio cosmológico. La célula extrasolar despierta del letargo astral. Tal reino no seguirá las leyes de la física.