De la Iglesia el fundamento Es Jesús el Salvador Por la obra de su gracia Le dio vida su Señor Para hacerla esposa suya De los cielos descendió Y su sangre por limpiarla En la cruz Él derramó. De entre todas las naciones Escogida en variedad, A través de las edades Se presenta en unidad En diversidad de pueblos Sólo tiene un Señor Una fe y un nacimiento, Un constante y puro amor. Ella alaba sólo un nombre, Sigue a una sola luz Guarda una esperanza Y su gloria es una cruz Por el celo que la anima De las almas corre en pos Y ambiciona por la gracia Conducirlas hacia Dios. A través de sufrimientos, De fatigas y dolor, El glorioso día espera En que vuelva su Señor; Consumada su carrera, Ya sin mancha estará; A las bodas del Cordero Victoriosa entrará.