Oh Dios, dignísimo Señor. Te alabamos hoy En respuesta agradecida por Tu bondad y Amor Con asombro admiramos Tu Creación al Contemplar. Bendiciones que por Gracia podemos disfrutar Pero el Bien incomparable Rey de la Creación Es Jesús don inefable: Luz, Vida y Salvación. La preciosa flor miramos tan pronto marchitar A Tu voluntad rendida en su fragilidad. Mas Tu semilla eterna en Tu pueblo estará Aunque ahora muy pequeña, al fin florecerá Por Jesús el Hijo Eterno, en gloria celestial De la muerte alcanzaremos, la Victoria final. Salvador a Ti queremos dar ofrenda de amor Pues con sangre Tu pagaste por nuestra Redención. No hay temores del mañana, de peligros o Aflicción. Pues Tu Espíritu nos guía, es nuestro Ayudador Sacrificio de Alabanza, con gozo, con placer En Tu Reino ofreceremos, por siempre y siempre Amén