Dejad que los niños vengan hacia mí, Sentaditos en mis piernas los guiaré ¡los guiaré! Sus cerebritos lavaré Y sus cuerpitos tocaré Es el modelo de la buena educación. Tendrán que estar callados Y siempre reservados En silencio todo es puro No es mundano. No sientan miedo niños Irán al cielo salvos Pero antes un infierno en vida les daré. Dejad que los niños vengan hacia mí, Sentaditos en mis piernas los guiaré ¡Los guiaré! Sus cerebritos lavaré Y sus cuerpitos tocaré Es el modelo de la buena educación. Tendrán que estar callados Y siempre reservados En silencio todo es puro No es mundano. No sientan miedo niños Irán al cielo salvos Pero antes un infierno en vida les daré. ¡Misericordia del señor! ¡El señor de tus pesadillas! ¡Misericordia del señor!