Yo me vine de mi tierra pa' las regiones del valle A cantar en una tierra donde no me conocían Cantaba por diez centavos una canción en la calle Cada vez que la cantaba orgulloso me sentía Entre Tocaimo y San Diego tuve una lucha constante Y algún desprecio del pueblo me obligó a segui' adelante Y algún desprecio del pueblo me obligó a segui' adelante Como yo cantaba solo me decían "el pregonero" Y en una de mis andanzas llegué una tarde a Urumita Y allí encontré una mujer y era de nombre Cecilia De allí salí enamorado y se iluminó mi sendero Por ella canté a la vida, por ella canté al amor Y me llené de valor para ganar la partida Y me llené de valor para ganar la partida Encontré compositores con mucha fama en el pueblo Cuando yo cantaba un verso ellos de mí se burlaban Pero yo me fui metiendo como la sortija al dedo Hasta lograr mi objetivo que era lo que yo buscaba Pa' darle nombre a mi nombre Y hacer de versos mi historia Y demostrarle a Colombia Cuánto valor tiene un hombre Y demostrarle a Colombia Cuánto valor tiene un hombre Algunos acordeoneros que parrandearon conmigo Cuando yo me equivocaba ellos de mí se reían Pero ellos se amilanaron, quedándose en el olvido Y yo, como fui constante, sigo vivo todavía Cantando versos de noche, cantando versos de día Hoy todo el pueblo conoce todas las canciones mías Hoy todo el pueblo conoce canciones de Leandro Díaz ♪ Fantástico, Charly