En un viejo almacén del Paseo Colón Donde van los que tienen perdida la fe Todo sucio, harapiento, una tarde encontré A un borracho sentado en oscuro rincón Al mirarle sentí una profunda emoción Porque en su alma un dolor secreto adiviné Y, sentándome cerca, a su lado, le hablé Y él, entonces, me hizo esta cruel confesión Ponga, amigo, atención Sabe que es condición de varón el sufrir La mujer que yo quería con todo mi corazón Se me ha ido con un hombre que la supo seducir Y, aunque al irse mi alegría con ella se las llevó No quisiera verla nunca, que en la vida sea feliz Con el hombre que la quiere por su bien o qué sé yo Porque todo aquel amor que por ella yo sentí Lo cortó de un solo tajo con el filo 'e su traición ♪ Hoy como ayer sigue igual mi canción Oh, porque nunca podré olvidar jamás su corazón