Olvídame si quieres ver lo que soy Despídeme de la invisible razón Quizás, tal vez si puedas ver mi interior Que no soy más que una posible canción Te hablaría como si estuviera viva Pretendiendo hasta tener un corazón Que defina los compases, melodías Pues sin ellos no tendría más razón Ser irreal un sueño más Uno que vive que no deja de luchar Ser irreal un sueño más Que ha decidido no morir al despertar Soy mil palabras que enseñaron mis abuelos Cuantas verdades me ha tocado asimilar Todas reales soy un ser de experiencia ¿Cuantas batallas las que faltan por luchar? Soy el pecado que precede el tiempo Soy las palabras que se callan al amar Soy el dolor que alimenta este lamento Soy la locura que se quiere liberar Soy mil palabras que inventaron En milenios ya gastados Soy la lucha de los taitas Preservando su legado La verdad que nunca calla Soy la yerba entre los labios Aprendizaje forzados Cicatrices de milagros Somos un sueño que no muere al despertar Palabras sin juzgar Somos un sueño que no muere al despertar Echar la voz a andar Somos un sueño que no muere al despertar Para encontrarnos mas caricia el alma Que en la piel nos sabe dar Soy en alegría, en tristeza, en sueños e ilusión De todo eso que he vivido una gran lección Y yo soy cada respiración Del cielo soy el color La magia en tus ojos cuando sale el sol Soy la melodía queriendo asomar El que todos los días para no de estar Supe que lo incierto es un punto y final Soy un nuevo comienzo, cosas que contar Soy la consecuencia de un momento de amor Un eco vibrante de una explosión La acción y la emoción La ley ancestral entrando en sesión