Real decreto de mi ser Sudor, caricias y luz Hotel, cortinas, sin querer Ausentes en un tragaluz Observo un sueño no invernal No sé, pareces de marfil No tengo nada que ofrecer Solo tormentas que no tienen fin Remito carta al otro mes de abril Repito errores en un bucle solo Me cambias reina por un viejo alfil No quise verte despegar tan pronto Y ahora caigo Caigo y me desmonto Seré locura y soledad Veré tus labios sin voz Seré un mensaje sin maldad Síntoma de odio aún precoz Saldré, huiré de la ciudad Del vacío y del temor Seré una piedra en alta mar El ritmo de un ser menor Saldré, huiré de la ciudad Del vacío y del temor Seré una piedra en alta mar El ritmo de un ser menor Haré cenizas el pasado Prendiendo este arlequín Tendré aquello que no has dado Un ángel blanco sobre Berlín