Cuando Álvaro Conrado Se marchó con su mochila, Regresar no había planeado Iba ofrendar su vida. Esos hombros valerosos llenos de revolución. Al tirano temeroso, temblar hizo en su sillón. Pues el chico sin pavor, Ha impulsado por la patria. Supo estar siempre a la altura Repartiendo fuerza y Alma El Libertador recibe De un cobarde represor, Una bala que le impide Llevar aire a su pulmón. Y envuelto en gallardía le dolía respirar, Un libertador nacía quien lo iba imaginar. Ni las balas lo han callado, hoy es héroe en la nación. Con tan solo 15 años inició... una revolución. El Libertador se aferra a su vida sin temor, No es la muerte lo que aterra a quien tiene convicción. Le aterraba la injusticia, le aterraba la traición. Era un chico sin malicia que hizo frente al dictador Y pagó con sangre el precio De querer liberación. Ese chavalito necio, Hoy es un libertador. Repartiendo bolsas de agua, Inmortalidad ganó. Por todita Nicaragua, Su nombre no se olvidó. Y envuelto en gallardía le solía respirar, Un libertador nacía quien lo iba imaginar. Ni las balas lo han callado, hoy es héroe en la nación. Con tan solo 15 años inició... una revolución Cuando al hospital llegaron, Nadie le quiso atender. Al libertador mataron, No había nada que hacer El libertador sonriente De este mundo se marchó, Pues sabía que su gente Vencería al dictador. Y hoy es símbolo de lucha, Mártir que su vida dió Su legado está en la historia, Su presencia está con Dios. Seguiremos adelante, Con más fuerza, con vigor. Llevaremos tu estandarte, Gloria al libertador. Y envuelto en gallardía le solía respirar, Un libertador nacía quien lo iba imaginar. Ni las balas lo han callado, hoy es héroe en la nación. Con tan solo 15 años inició... una revolución.