Siempre tuvo poca sensación de libertad, Aprendió lecciones sobre urbanidad. Uno más con el trauma de competir, Que se convierte, poco a poco, en su obsesión. Los comienzos fueron duros para él: Aquellos años de colegio marcaron su ser. Día tras día frente al nuevo Dios, Hasta que suena la señal La foto de aquél señor, La Cruz y la sumisión, Eran algo más que insinuación Ente educativo, Danos algo nuevo. Demasiadas lagunas para educar. Sobra castigo escolar. Por papeles firmados, Aguantar: esos miedos que marcan La personalidad. En el salón de su casa. Colgará el cartel como un orgullo familiar Ya cumplió las normas ¡consiguió titulación! Preparado para un exámen no importaba más Ahora la cosa sin competencia en la vida. Se siente perdido, en la lucha diaria En la calle. Sufriendo muchas veces Va caminando muy mal. Desecha el reciclaje Va caminando muy mal