De la guerra cruel señor Implacable hasta el horror Defendió la santa cruz y al enemigo venció Pero la mentira habló Y a su amada convenció De que en la batalla su soldado murió Ella no lo soportó Y la vida se quitó La encontró pálida y fría No aguantó el dolor Maldijo todo aquello que defendió Murió su corazón Y su alma rota allí lo abandonó Para él no hay perdón La sangre saciará la sed y el rencor Su dios lo traicionó Y ahora vaga entre las sombras y el terror Sin un cielo al que implorar Tantos siglos pasarán Cambiará su reino por el de la oscuridad No lo queda humanidad No hay perdón a su maldad Condenado está por toda la eternidad Ella no lo soportó Y la vida se quitó La encontró pálida y fría No aguantó el dolor Maldijo todo aquello que defendió Murió su corazón Y su alma rota allí lo abandonó Para él no hay perdón La sangre saciará la sed y el rencor Su dios lo traicionó Y ahora vaga entre las sombras y el terror No aguantó el dolor Maldijo todo aquello que defendió Murió su corazón Y su alma rota allí lo abandonó La buscó por amor Viviendo en otra al fin la encontró Y el cielo comprendió Que nada hay más fuerte Que el verdadero amor