Y esta voz, es más menos como yo, No se asoma mucho al aire para no auyentar al sol. Y pienso yo en la voz de aquel tenor, La miraba y de oro era, Pues la mía es de madera, La que flota en el cajón De las cuatro notas guarras y el corazón. No puedo cantar más fuerte, Por la ausencia brillan mis agudos Son felpudos donde se limpian las botas Tus recuerdos que me azotan. Pues mi voz, cuando me canta al oido, Yo la echo enfurecido, pues araña los latidos De mi arteria más macarra, La que mis huevos amarra Y me impulsa a cagarme en tó... Esta voz.