La bienvenida tú nos diste a tu casa, Por el velo rasgado pudimos entrar. Levantaste nuestra cabeza, y al ver tu cara, Sin vergüenza pudimos caminar. Nos abriste esa puerta y a tu hogar podemos entrar. Con brazos abiertos nos esperaste, y hoy descansamos en tu paz. Nos acercaste con amor a tu rebaño, y nos cubriste de santidad. Tú sanaste nuestras heridas con tu mano, y somos libres para amar. Nos abriste esa puerta y a tu hogar podemos entrar. Con brazos abiertos nos esperaste, y hoy descansamos en tu paz. Somos hijos redimidos, aceptados, aceptados. Proclamaremos desde lo alto ¡cuánto nos amas! ¡cuánto nos amas! ¡cuánto nos amas! (nos amas) ¡cuánto nos amas! (nos amas) ¡cuánto nos amas!(nos amas) ¡cuánto nos amas! (nos amas) Es tan alto y tan ancho, tan profundo es tu amor. Nos abriste esa puerta y a tu hogar podemos entrar. Con brazos abiertos nos esperaste, y hoy descansamos en tu paz. Nos amas, nos amas, nos amas, nos amas, nos amas, nos amas. ¡cuánto nos amas! ¡cuánto nos amas! ¡cuánto nos amas! Es tan alto y tan ancho, nada se puede comparar a tu amor. Nos amas, nos amas, nos mas, nos amas.