Porque querer así resulta bueno Es dicha dividida a la mitad Conjugando manías y regresos Desde una ventajosa claridad. Te quiero a ti, que inventas la ternura Donde lo cotidiano se sublima Y ensartas con un beso mi cordura Y lo terrible de tu compañía. Me quieres tu, si abordo la aventura Y arrimo hasta tus ojos la humedad Transnochándote en alma casi muda En el sinfín vital de la ansiedad. Porque querer así resulta acaso Algún vestigio de sinceridad Un violín suspendido del espacio En el concierto de la obscuridad. Te quiero a ti, mi fuego, mi delirio Mi motivo de huir y desear Que pones en su sitio mis desvíos Con la tibia tristeza de esperar. Me quieres tú, si apaño tus locuras Y apago en tus armarios las polillas Burlando tus dolores y tus dudas Cuando tu corazón se vuelve astillas. Porque querer así, resulta todo Si beben de mis labios tus palomas Se agita la razón, resbala el lodo Porque querer así, la vida asoma. Te quiero yo, mi ola, mi esperanza, Mi alondra, mi canción, mi timonel Me quieres tú, si apuro la confianza De soñar, de volar y padecer.