¿Qué harías tú si tuvieras el poder De dominar el destino de cualquier humano ser a tu merced? Yo lo tengo claro, mi sed de justicia ha actuado Y mi intelecto empezará el renacer. Ahora que tengo todo lo que necesito, soy el hito, El erudito que logrará reflotar este lugar marchito Al que llaman mundo, si en tan sólo un único segundo, Tantas vidas inocentes caen al hoyo más profundo. Y yo soy su clave, el salvador de este planeta infame, Actúo sólo, yo no necesito que me llamen, Algunos tal vez me aclamen, otros tal vez me teman, Pero soy dios con un cuaderno y con un lápiz entre mis yemas. Shinigamis me observan y parecen visual keis, Noto en sus miradas que me temen como a un rey. Y es que ni el mejor detective mundial, Sería capaz de igualar o frenar mi potencial. Ya tengo miles de nombres y todos los hombres me temen, Vi que es mi presencia amenazadora lo que les retiene. Frío, frívolo, sádico, calculador, hace tiempo que no siento amor por ningún ser, No pueden ver que son peones en este ajedrez. Quiero ver vuestra sangre roja derramándose Soy el protagonista, el causante de estos cadáveres Amado y odiado, sigo y respeto mis cánones, ¿Oyes las campanas mientras disparo mis cañones? Ninguno cree ser tan solo una marioneta Pero todos son la senda que me guía hasta mi meta. Ningún sucio niñato podrá detener mis pies, Porque tengo un objetivo y tengo claro cuál es. (Nadie me conoce pero ataco entre las sombras, Todos reconocen el valor de esta, mi obra. Nadie me conoce pero ataco entre las sombras, Todos reconocen el valor de esta, mi obra.) ¿Qué revolución se libra sin muerte? No puedo dejarlo en manos de la suerte. Yo soy el juez omnisciente y omnipotente Y avanzo siguiendo la ley del más fuerte. Te quedan sólo cuarenta segundos. Y es mi lápiz el que dicta tu rumbo. Con mi cuaderno en la muerte te inundo ¡Doblegaos y suplicad al dios del nuevo mundo!