Rojo sangre, un color muy nacional Morbo, suerte, sol y arena pide Dios Arte, muerte, sirve de alimento Pase valiente y vuelta al ruedo Cuando el acero me traspasa el corazón Y se le llama fiesta, y otra vuelta de tuerca Cuando el sadismo se convierte en tradición Y la faena ingesta y nadie se molesta Pinchos, siente, recital multicolor Paso doble, ambiente de nobleza y de pasión La oreja, presidente, los pañuelos al viento Alza la frente y mira al cielo Cuando el acero me traspasa el corazón Y se le llama fiesta, y otra vuelta de tuerca Cuando el sadismo se convierte en tradición Y la faena ingesta y nadie se molesta Cuando el acero me traspasa el corazón Y se le llama fiesta, y otra vuelta de tuerca Cuando el sadismo se convierte en tradición Y la faena ingesta y nadie se molesta Nadie, nadie, nadie, nadie (eh-eh) Nadie, nadie, nadie, nadie (eh-eh) Nadie