En donde quiera que estés, escucha mi canto triste Conmemorando la vez, que sollozando me diste Un adiós para volver pero que nunca volviste El rio Arauca creció, con el llanto que vertiste Mi corazón se partió y ahí tiene las cicatrices Decir que ya te olvido sería algo más que mentirte Desde aquí bella mujer, el corazón no resiste El gran deseo de tener, los besos que con matices Junto al rescoldo de piel nos hacían estremecer Amándonos tan felices Ya siento dulce el dolor, que empezó cuando te fuiste Hay está en el corazón con frutos y con raíces Y a falta de tu calor es muy probable mi amor Que Pronto me descuartices. Oye este canto mi amor, donde quiera que te encuentres Escucha bien el rumor, tan triste y tan elocuente Es la voz del corazón que te ha esperado por siempre Cuando la brisa al pasar, te acaricie dulcemente Piensa que yo en mi cantar, te añoro sinceramente Y que te voy a esperar como el río a la creciente Mi piel te quiere tocar, mis pupilas quieren verte Mi alma se quiere bañar, en el cristal de tu fuente Y yo deseo reposar vivir, vivir y soñar Sobre tu pecho latente Nunca te voy a olvidar, tenlo sagrado y presente Ya que te logre grabar, como un tatuaje en mi mente Y esto lo puedes jurar, que siempre te voy amar Mucho después de la muerte.