Cantemos una oda a tu estupidez Padecen tus neuronas de ingravidez Ignorancia, veneno que abunda en ti Condenado a no ver más allá de tu nariz No me tragaré el orgullo que agotó a nuestro mundo Y que Nadie quiso ceder y pedir perdón Cambiaré buenos actos por tempestad No esconder más los puños para mediar No me tragaré el orgullo que agotó a nuestro mundo Y que Nadie quiso ceder y pedir perdón No me tragaré El orgullo que agotó a nuestro mundo y que nadie quiso ceder No me rendiré a pies de quien me desprecia y sé Que está será la última vez Que me verás caer Me esforzaré por hacerte pagar El precio de tener que vivir bajo el mismo sol