Salió de su vieja aldea Una tarde de un verano Y se embarcó con sus sueños Rumbo a este puerto lejano Era pobre su equipaje Una pipa allí en su boca, un acordeón desteñido y una mudita de ropa. Se hicieron duras sus manos apretando aquel arado. Abriendo surcos y surcos bajo ese sol despiadado. Y fue creciendo ese campo dando azar hasta el ocaso. Y florecieron las viñas con su bendito trabajo. Abuelo "Gringo" te admiro Abuelo "Gringo" te quiero Porque con tu sacrificio Enriqueciste mi suelo. Apenas nacía el alba ya salía de la chacra. Palo y rastrillo en el hombro entre arrullo de torcazas. Hoy, hoy en sus ojos celestes hay un dejo de nostalgias. Quizás añore su aldea, pero él, él adora mi Patria. Ya su cuerpo se ha encorvado Y sus manos no trabajan Y fuma y fuma si pipa En su sillita de paja. Abuelo, abuelo "Gringo", mi abuelo. ¿Cómo no he de cantarte? Si has dado tanto a mi tierra Desde el día en que llegaste.