Era sábado en la tarde el día que llegué a mi tierra
Y me contaron la historia que le ocurrió a la gordita
Era sábado en la tarde el día que llegué a mi tierra
Y me contaron la historia que le ocurrió a la gordita
Y yo que me trasnochaba y hasta pensaba quererla
Hoy están jugando con ella y esas cosas me mortifican
Tanto que vaciló, la gordita, y nada quiso conmigo
Ahora le tengo esta cancioncita, con esta la castigo
Tanto que vaciló, la gordita, y nada quiso conmigo
Ahora le tengo esta cancioncita, con esta la castigo
Y en los Estados Unidos
José Hernández Cano y Alfonso Quinteros
Estrellas Vallenatas
La mujer que me desprecia, yo la castigo cantando
Porque creo que maldecirla es algo de cobardía
La mujer que me desprecia, yo la castigo cantando
Porque creo que maldecirla es algo de cobardía
Sé que el día menos pensado yo me salgo con la mía
Y la he de encontrar 'rrepentia, sufriendo el haberme engañado
Ahora, ¿qué pensará la morena cuando escuche mi canto?
Le quisiera gritar: "¡mala hembra!", pero mejor me aguanto
Ahora, ¿qué pensará la morena cuando escuche mi canto?
Le quisiera gritar: "¡mala hembra!", pero mejor me aguanto
Justo Chacón y Camilo Ribas
Empresario de categoría
♪
Anda
♪
Mejor me alejo cantando por un sendero guajiro
Esos que en noches de luna, el alma canta y se inspira
Mejor me alejo cantando por un sendero guajiro
Esos que en noches de luna, el alma canta y se inspira
Al despertar la mañana, cojo de nuevo el camino
Que me ha de marcar el destino cuál será el final de mi vida
Quiero pasar la vida cantando con otra muchachita
Pero primero pongo la mano, no vaya a ser gordita
Quiero pasar la vida cantando con otra muchachita
Pero primero pongo la mano, no vaya a ser gordita
Ay, mi gordita sabrosita
Ella me alborota y está cerquita
Ay, que no la encuentro y yo la busco
La muchachita, ay, la gordita
Ay, mamacita, dame ese gusto
Ay, mi gordita, que no me asusto
Que sea con gusto, está cerquita
Ay, mi gordita está sabrosa
Ella me alborota yestá cerquita
Ya la encontré, a mi gordita
Que está sabrosa, ay, mi gordita