En una tarde de toros, muy lejana de mi pueblo, Volví a encontrar la mujer que ablandó mis sentimientos, El corazón en el pecho, galopaba de contento, Quién se iba a imaginar de encontrarla con el tiempo, Me dijo cómo le va, la vida cómo lo trata, Le di un besito en la frente, la perdoné por ingrata, Por hacerme sufrir tanto, linda y preciosa muchacha. Y el cimarrón de tu pecho tiene carrera muy larga, Ojalá se te escapara de los corrales de tu alma, Pa' gritar que tiene el toro el mismo amor de la manga. En otra tarde de toros, más cercana de mi pueblo Corrí a mirar la mano que contemplé en otro tiempo, El deseo de acariciarla me iba quemando por dentro, A la que se decida calmar mi sufrimiento, De tarde en el rio pude armar del reflejo su figura, Por los caminos del llano se ve más grande la luna, Solo faltas tú mi reina para adornar la llanura Y hoy son muchos los lugares que contigo los paseo Y hasta quisiera olvidarte, te juro que no lo creo, Tendrían que acabarse el llano el joropo y el coleo.