Llegó la brisa de enero,
Peinando los pajonales,
Más atrásito febrero,
Formando esos terronales,
Y Marzo viene altanero quemando chiribitales. (Bis)
El bravo sol del verano,
Pone a mí Llano escaso de manantiales,
El pasto seco a la vera del camino,
Se pone rucio y se ven los animales,
Buscando un hilito de agua por ahí en los Morichales.
Al palmotearle los lomos,
A mi caballo veo que el tierrero le sale,
No es abandono, es el polvo que la brisa,
Pasa de prisa formando esos vendavales,
Que perfuman su destino abrazando mastrantales.
Atrás quedaron los meses,
De aguaceros torrenciales,
Después de qué los ríos se crecen,
Han mermado sus caudales,
Y el ribereño carece de los transportes fluviales.(bis).
El llano se enrumazona,
Se ve azuloso por las quemas naturales,
Es muy hermoso mirar al flor amarillo,
Y al gualanday, cuando se florean iguales,
Un amarillo, un mora'o parecen artificiales.
El criollo trabajador,
Callejoneando gana unos cuántos jornales,
La mayoría de los pueblos en el llano,
En el verano son sus fiestas patronales,
Y uno en las fiestas es guapo con mujer caballo reales.