Es cierto que hay veces que uno no quiere entender Que aquella vieja cinta no se puede regresar Que la anestesia de olvidar No dura siempre y cuando falta no hay más que llorar Por que si lloras pa' dentro te inundas Como decía don Eulalio al cantar Por que el reloj no respeta ni espera Y en el amor no hay incondicional Es cierto que hay veces que uno no quiere escuchar Todas las voces que tocan tu fragilidad Y que resuenan hasta quebrar Como los llantos de un niño temiendo a la obscuridad Y no te atreves a verte desnudo Sin un pelambre que te pueda arropar Y no te quieres sentir indefenso Ante lo incierto de la soledad Y aquel boleto que nunca tomaste Y que con miedo dejaste pasar Tuvo su tiempo, su hora y su viaje Ya no es momento de irlo a abordar Es cierto que hay veces que uno no quiere entender Es cierto que hay veces que uno no quiere escuchar Es cierto que hay veces que uno no quiere aceptar Que todo comienzo siempre tiene su final