En las lejanías dejé mis tristezas, He forjado solo mi robusta sed: Oscuro no valgo todas las grandezas Que siento muy hondo, Que siento muy hondo Dentro de mi ser. Que siento muy hondo Dentro de mi ser Vago en el silencio de mis noches largas, Camino en las sombras sin hallar la luz; Mis lágrimas dulces saben más amargas, Ya no hay quien me ayude, Ya no hay quien me ayude A cargar la Cruz. Mis lágrimas dulces saben más amargas, Ya no hay quien me ayude, Ya no hay quien me ayude A cargar la Cruz. Corazón anciano, ya no hay quien te quiera, La tragedia dura de mi senectud; Ya para mis huesos, cuando yo me muera, Tal vez lo más blando, Tal vez lo más blando Será el ataúd. Ya para mis huesos, cuando yo me muera, Tal vez lo más blando, Tal vez lo más blando Será el ataúd.