Que el maquillaje no apague tu risa Que el equipaje no lastre tus alas Que el calendario no venga con prisas Que el diccionario detenga las balas Que las persianas corrijan la aurora Que gane el "quiero" la guerra del "puedo" Que los que esperan no cuenten las horas Que los que matan se mueran de miedo Que el fin del mundo te pille bailando Que el escenario me tiña las canas Que nunca sepas ni cómo ni cuándo, ni siento volando, ni ayer ni mañana Que el corazón no se pase de moda Que los otoños te doren la piel Que cada noche sea noche de bodas Que no se ponga la luna de miel Que todas las noches sean noches de boda Que todas las lunas sean lunas de miel Que las verdades no tengan complejos Que las mentiras parezcan mentiras Que no te den la razón los espejos Que te aproveche mirar lo que miras Que se divorcie de ti el desamparo Que cada cena sea tu última cena Que ser valiente no salga tan caro Que ser cobarde no valga la pena Que no te compren por menos de nada Que no te vendan amor sin espinas Que no te duerman con cuentos de hadas Que no te cierren el bar de la esquina Que el corazón no se pase de moda Que los otoños te doren la piel Que cada noche sea noche de bodas Que no se ponga la luna de miel Que todas las noches sean noches de boda Que todas las lunas sean lunas de miel Que todas las noches sean noches de boda Que todas las lunas sean lunas de miel ♪ Nos dijimos, "Adiós, ojalá que volvamos a vernos" El verano acabó El otoño duró lo que tarda en llegar el invierno Y a tu pueblo el azahar otra vez el verano siguiente Me llevó y al final del concierto me puse a buscar tu cara entre la gente Y no hallé quién de ti me dijera ni media palabra Parecía como si me quisiera gastar el destino una broma macabra No había nadie detrás de la barra del otro verano Y en lugar de tu bar me encontré una sucursal del banco Hispanoamericano En tu memoria vengué a pedradas contra los cristales "Se que no lo soñé" protestaba mientras me esposaban cadenas federales En mi declaración alegué que llevaba tres copas Y empecé esta canción en el cuarto donde aquella vez te quitaba la ropa Y nos dieron las diez y las once, las doce y la una y las dos y las tres Y desnudos al anochecer nos encontró la luna Y nos dieron las diez y las once, las doce y la una y las dos y las tres Y desnudos al anochecer nos encontró la luna