Uh, te miro y pienso en la vida Siempre soñando en detenerte Me vas quitando esta piedad Tú, desde la humanidad en adelante Y de lo enfermo que el mundo está Eres la sangre de mi arte Ya no queda hambre ni verdad por construir Ni los minutos que perdí en caminar Ni las carreteras del dolor Ni las cortinas de la felicidad Ay! Yo te digo, pues sí Maldigo al tiempo y su locura Maldigo el hambre que siempre existió Con este sol y esta luna Maldigo al tiempo y al reloj