Tanto pedí, tanto esperé Que yo mismo alejé Lo que creí para mí Y es que nada nos pertenece Por más que piensas que mereces Menos las margaritas Que amamos porque libres florecen. Tanto soñé y tanto dije Rebosando el dique Que me contiene Y me desparramé Me entregué a destiempo Justo antes del momento cierto De descubrirnos mutuamente Me llevé todo lo que había en frente Incluso la promesa de tenerte. Tanto viví, tanto erré Hasta que te encontré Que cuando te ví, no mentí Quise fundirme en tí Sin miedo a equivocarme Sabía que eras tu a quién esperaba Pero faltó quietud Para escuchar lo que tu deseabas Y tanto sufrí Y tanto me dolieron Aquellos gestos lisonjeros Que te ofendí Y me avergoncé de mi Al saber que apenas eran pasajeros Tan pronto pasaron Que cuando se fueron me dejaron Un enorme hueco en el pecho Pero lo entiendo ya pasó No hay nada que no hubiera hecho Para tenerte cerca de mí. Tanto pedí, tanto esperé Que yo mismo alejé Lo que creí para mí Y es que nada nos pertenece Por más que piensas que mereces Menos las bailarinas. Que amamos porque libres florecen.