Extrañados vemos como mienten sumergidos en frustración, Duros golpes han dañado sus mentes, justifican su decepción. Yo no voy a permitir que la mediocridad se apodere de mí, Sé que depende de ti, que depende de mí, que todo sea feliz. Voces que temblaban de horror creían lo peor y se pudrieron, Tan lejos de su condición estamos tú y yo, con algo que ellos no. Rendidos atormentan sus mentes inventando una explicación, Se conforman y predican su peste porque perdieron su razón. Yo no voy a permitir que la mediocridad se apodere de mí, Sé que depende de ti, que depende de mí, que todo sea feliz. Voces que temblaban de horror creían lo peor y se pudrieron, Tan lejos de su condición estamos tú y yo, con algo que ellos no... Tienen!