Cuando empezaba yo a bailar, a un milonguero conocí Que mi destino había de marchitar A sus caricias me entregué, de sus palabras me confié Y a poco vi que empezaba a fallar Puse mis sueños en su amor, que parecía avasallador Sin ser más que un mezquino algo vulgar Y en poco tiempo su traición manchó mi vida de rencor Y quedó mi alma llena de pesar Amigazo Déjeme que le cuente La historia doliente De mi muerta juventud Compañero Tanto mal me ha hecho Que siento en mi pecho Muchas ganas de llorar ♪ De su camino nada sé, aquel engaño perdoné Y no hay rencor ni pena, ni dolor Y al fin con otra ha de pagar, y aquella infamia ha de lavar Con llanto de su ingrato corazón ♪ Compañero Tanto mal me ha hecho Que siento en mi pecho Muchas ganas de llorar