Ya se ha apostado la vida En carreras de caballo Pero esta era diferente Era carrera de carros Y el odio de dos rivales Y un amor que jugaron Era carrera de muerte También jugaron la vida Sentían muy pequeño el mundo Y que los dos no cabían Aparte de aquel orgullo Era el amor de Cristina A lo que llega el dinero El odio y el amor Sergio en su Z-28 Eduardo en su hermosa Ford Los dos estaban seguros De un poderoso motor Esa mujer va a ser mía Eduardo le dice a Sergio Con mi buena camioneta Hasta al diablo yo le juego No te voy a discutir Porque pronto lo veremos Cuando a las tres se arrancaron Salieron casi volando Los dos motores roncaban Ninguno iba ganando Y cuando se dieron cuenta Ya era tarde pa' frenarlos Cayeron en un abismo Los dos perdieron la vida Nadie ganó la carrera Y ni el amor de Cristina Se quedaron empatados La muerte ahí fue testiga