El viejo sol jugaba a hacer burbujas Que reventaban en la piel de lagartijas Mientras el alma de un niño se estremece Al ver que no todas las cosas Son lo que parecen Se oía el viento rumorear En la lomita Por la que solía bajar En bicicleta Mientras el árbol florido Se entristece Al ver que lo que un día es nuevo Pronto desvanece La luz filtrada entre el damasco Mamá regando Amor de perros, amor de casa Amor de hermanos Qué bendecida la infancia mía Qué afortunado, qué hermoso Qué hermoso que fue Qué hermoso que fue Qué hermoso que fue Qué hermoso que fue Las piezas anchas, el barrio humilde Papá llegando Amor de juegos, amor de baile Amor de árbol Qué bendecida la infancia mía Qué afortunado, qué hermoso Qué hermoso que fue Qué hermoso que fue Qué hermoso que fue Quilpué