El hombre nace y muere a veces sin vivir Camina desde el niño al viejo, sin gozar Eso que él mismo le llama felicidad Y si la tiene aquí, la va a buscar allá Tropieza tantas veces en una misma piedra Fruta que llega, pasa sin madurar Si tiene tira o quiere tener mucho más Es un misterio y es de la vida la sal Tiene alma de guitarra Encordada de estrellas Y es una falta, envido su corazón Sólo se diferencia del reino animal Porque es el hombre, el único capaz de odiar Pero mientras el hombre Se asombre llore y ría Será la fantasía que Dios creó Es lágrima de niño y llanto de crespín Es monte denso, copla, nido y manantial Es muy capaz de dar la vida o de matar Es luz y sombra, tierra arada y arenal La pucha con el hombre Quiere ser tantas cosas Y nunca es más que cuando tan solo es él Es un camino que anda solo bajo el sol Sendero trajinado por sueños de amor Es un viejo legüero, garrotiado de chango Con son de vino triste y de carnaval Sólo se diferencia del reino animal Porque es el hombre, el único capaz de odiar Pero mientras el hombre Se asombre llore y ría Será la fantasía que Dios creó