Cuentan que enterrado, en el negro y tibio asfalto En un barrio desolado, está el bar de los fantasmas Ningún vivo que cruzara el umbral espeluznante Vivió para contar chambre Sin embargo la leyenda, que se arrastra entre las lenguas Habla de un bar tender muerto que le sirve a los espectros Ilusiones del pasado en cabezas reducidas Por vudús del Río Sapo Cuando bailan Les ponen a Enrique Guzmán Y las penas y las conciencias se van Y más tarde, pegadito con Libertad Lamarque Y las penas y conciencias se les van Y ya suenan las campanas, de la Iglesia de Don Rúa Son las 12 de la noche, se prendió la necrorumba Y salen los condenados de sus tumbas y agujeros A agarrar una gran zumba ¡Y olvidarse que están muertos! Cuando bailan Les ponen a Enrique Guzmán Y las penas y las conciencias se van Y más tarde, pegadito con Libertad Lamarque Y las penas y conciencias se les van Y las penas y conciencias se les van Y las penas y conciencias se les van Y las penas y conciencias se les van