Óyeme, un sueño he tenido Pero no quería contarte. Jesucristo había venido Pero tú, tú te quedaste Cuantas penas, angustia y dolor Puede ver en tu mirada Sin consuelo pedías perdón Pero ya nadie escuchaba. Siempre te avisé que pasaría Y vos en mi cara te reías Qué pasó con grandeza y tu soberbia. Te hable del Salvador lo despreciaste Y pudiste ser feliz mas te condenaste Hay de ti que nunca mas se oirá tu voz.Óyeme te ví en el sueño Padecer por tu destino En una llama que atormentaba Aquellas almas junto al camino Quité mi vista de donde estaba Toda esa gente desesperada Oí sus gritos sus mil lamentos Mientras el fin allí llegaba. Siempre te avisé que pasaría Y vos en mi cara te reías Qué pasó con grandeza y tu soberbia. Te hable del Salvador lo despreciaste Y pudiste ser feliz mas te condenaste Hay de ti que nunca mas se oirá tu voz...