Anoche cerró por duelo El bodegón "La Maroma", Murió el negrito Carmona Remanyao escabiador. En el mistongo convoy Donde el pobre era velao, Varios curdas jubilaos, Acariciando el cajón, Lagrimeaban apenados Empinando semillón. Una mosca que había entrao Y rondaba indiferente Se fue a parar justamente En la nariz del finao. Rocatagliatta, el pesao, Rechupado como un faso Viendo la mosca en el naso Le pego tal bofetón Que hizo saltar de un zurdazo A Carmona y al cajón. El jonca quedó forfai Y Grappini, con un llanto, Sentó al difunto en un banco Para que descanse en paz. A su lao El Bataraz Empezó a contarle un cuento, Mientras que el Taita Mamerto, Con un filoso puñal Quería clavarlo al muerto Porque lo miraba mal. El peluquero Calvete, Viendo al cadáver chivudo, Se acordó de su laburo Y lo afeitó hasta el copete. Calló el punga Firulete Con unas cuantas chirusas, Venía de una garufa Empuñando un bandoneón Y entre curdas y papusas Se armó una milonga flor. La milonguera Renée Apantallando al finao, Creyendo que era un mamao Quería darle café. Melena y El Yacaré Estaban jugando al truco Y el Goruta Benvenuto, Encargado del convoy, En camisón y confuso Rajó pa' la treinta y dos De pronto en esa reunión Se hizo presente la yuta Y a la curdela Batuta La fue arriando pa'l camión. Garabito y Chicharrón Se piantaron con el vino Y el muerto fue detenido Pues un novicio botón Se lo llevó de testigo A prestar declaración.