No me quieres más, ni te culparé Si de esto eres capaz, mi llanto ocultaré Pero solo tú, tú y mi corazón Darán cuentas a Dios alguna vez Vivir Como una sombra atrás de ti Como un eterno soñador Quise alcanzar tu amor Para abrazar mi fe Rodé Y entre mis lágrimas ahogué Los dulces pétalos de luz Que desfloraban en mi cruz Como un turbión, tus labios Por ellos me negué a la vida Por ti, me resigné al dolor Y hoy Que de rodillas a tu alma quiero amar Tus labios me dirán adiós