Surca el Ebro rumoroso Húmedo lecho de arenas Siendo el holocausto sus venas De tanto vergel frondoso Sin que hoy olvide orgulloso En su lento caminar Que hubo otro tiempo sin par En que a gloriosas empresas Las naves aragonesas Altivo condujo al mar. Pero ante grandeza tanta Ante denuedo tamaño De la patria el aledaño El aragonés quebranta Y con atrevida planta Buscando riesgo mayor En el revuelto fragor De la embravecida guerra De Leónidas la tierra Admiró a Roger de Flor. Aun hoy en tierras lejanas de los mares a través Recuerda el nombre francés Las visperas sicilianas Y con unas naos que ufanas En una y otra función Dueñas y señoras son Desde el Tauro hasta el Atlante No hay playa dónde no plante Sus pendonse Aragón. Pero esta nación audaz Que con sus armas aterra Si Alejandros en la guerra Cuenta Numas en la paz Aquí del soldado en faz Sin menoscabo ni insulto Que pueda quedar inulto Guarda la ley su franquicia Que en Aragón la justicia Tiene a par de Dios su culto. Aquí cada cual ufano Sabe ser con pecho entero Para el combate guerrero Para la paz ciudadano Nadie tolera al tirano Sea plebe o sea rey Porque el pueblo la grey Busca sin temor ni ardid La independencia en la lid La libertad en la ley. Musa cese ya tu canto Porque no hay voz arrogante Que tan altas glorias cante Ni pregone esfuerzo tanto Basta con el nombre santo De tan insigne nación A colmar la admiración Pues cuanto grande se encierra Sobre la achurosa tierra En ti se cifra Aragón.