Ahogué los ojos, até las palabras, Cerré la puerta y amarré los sueños Y me escondí detrás, me dí la espalda, Y decreté la noche y el invierno... Para quedarme a solas con la nada Y mientras yo me encierro todo crece Los árboles levantan su mirada Las sombras se derriten si amanece Y los amantes se ofrecen el alma Afuera el mar insiste en cada gesto Y adentro una canción amordazada Empieza a galopar en el silencio Se atreve a la alegría... estalla y canta Quiero vivir! Quiero vivir! Quiero vivir! Quiero vivir! Voy a aprender a vivir...