Hay un abuelo que esta Al infinito mirando Son las diez de la mañana Y sus hijos no han llegado Piensa que será el trabajo Y quiere justificarlo
Quizás llegaron los nietos Tendrán que hacer el asado A la tarde vendrán todos Para entretenerme un rato
Pero hay un relog que avanza Y el que no quiere mirarlo Hoy como nunca las horas Se le han pasado volando ♪ Ya son las seis de la tarde Los que estaban se marcharon Familiares de otro abuelo Porque los de él no llegaron Qué pensaran esos hijos Que a su padre abandonaron Deben creer que en la tierra No hay nadie para juzgarlos Por allí hay un mate frio Que espera el calor humano Como espera las caricias El rostro de aquel anciano Ya son las diez de la noche Las luces se han apagado Y en el rincón de una pieza Hay un abuelo llorando Dijeron sus compañeros Que lo oyeron murmurando Domingo día del padre Porque te habrán inventado