Me contaron que no eres la misma Me contaron que mucho has cambiado Me contaron que nadie se arrima Será que tú cuerpo está en envenenado Preferible no haberme enterado Quién veía esa cara de niña Con tristeza recuerdo el pasado Malaya tu suerte, acabaste tu vida A Dios le pido que esto sea un sueño Para no despertarme jamás Y dormirme profundo yo quiero Y seguir soñando, pues tú ya no estás Me contaron de tus malos pasos Tú bien sabes que nada es oculto De la iglesia salí de tu brazo Y hoy que me cuentan lamento tu mundo Pero el tiempo que nada perdona Confundida entre tu amargo llanto La revancha a tu puerta se asoma Nada está perdido, levanta tus manos A Dios le pido que esto sea un sueño Para no despertarme jamás Y dormirme profundo yo quiero Y seguir soñando, pues tú ya no estás Y dormirme profundo yo quiero Y seguir soñando, pues tú ya no estás