Por detrás del escenario hay mucho más que un telón Un caminito de vuelta Una nochecita en vela, una nochecita en vela Con la sola compañía de la luna y las estrellas. Silencio en la madrugada El sonido de un motor, el sonido de un motor Y la luz de vez en cuando de otro amigo conductor. Pero eso da los mismo Porque al subir cada noche Cada noche al escenario Se le olvida lo demás al escuchar los aplausos. Un artista es algo más que la voz del escenario Alguna veces la vida le juega malas pasadas Le juega malas pasadas Como todo ser humano solo tiene que afrontarlas. Pero tiene que seguir superando las barreras Superando las barreras Para que nadie le note que está escondiendo su pena. Pero todo eso da lo mismo Porque al subir cada noche Cada noche al escenario Se le olvida lo demás al escuchar los aplausos. El calor de su familia se llevara al despedirse Un sendero por delante Y su casa deja atrás, y su casa deja atrás Esperando a que regrese después de su caminar. Son pocos los que lo ven En la oscura madrugada, En la oscura madrugada En cualquier gasolinera Intentando descansar. Pero todo eso da lo mismo Porque al subir cada noche Cada noche al escenario Se le olvida lo demás al escuchar los aplausos. Cuando se levanta el día La noche ya se ha acostado Y sin que nadie le vea Clareando llega a casa Clareando llega a casa Y sin hacer un solo ruido Busca el calor de su cama. Un susurro en el oído Le pregunta cómo ha ido Y casi sin contestar Ya se ha quedado dormido. Pero todo eso da lo mismo Porque al subir cada noche Cada noche al escenario Se le olvida lo demás al escuchar los aplausos.