Que nunca es tarde, Dirán los positivos. ¿Con qué derecho me siembran esa duda? Si a mí me gusta pensar que los suspiros Que nunca fueron no podrán ser jamás. Que para eso Jesús nos dio las cruces, Que para eso inventaron los entierros, Que para eso los ojos los tenemos Bajo la frente y no viendo para atrás. Pero si acaso fuera que yo me equivocara Y mis letras pudieran ir donde nunca fui, Pienso quitarle el polvo a las memorias vagas, Que como los cometas pasan sin ser de aquí. Lo que nunca te dije Es que quise ser todo Lo que tú me pidieras Pero no lo logré. El fracaso es mas mío Porque al final de cuentas De ese cuento de hadas Yo solía ser el rey. Lo que nunca te dije Es que creo que el destino Fue un tuerto entre ciegos Con la noble intención. De encontrarnos de frente Cuando nunca debimos Caer en la rutina Sólo en la tentación. Pero si acaso fuera que yo me equivocara Y mis letras pudieran ir donde nunca fui, Te lo digo valiente, pues sobra la distancia Y no hay error más grande que el que ya cometí. Lo que nunca te dije Es que quise ser todo Lo que tú me pidieras Pero no lo logré. El fracaso es mas mío Porque al final de cuentas De ese cuento de hadas Yo solía ser el rey. Lo que nunca te dije Es que creo que el destino Fue un tuerto entre ciegos Con la noble intención. De encontrarnos de frente Cuando nunca debimos Caer en la rutina Sólo en la tentación.