Rompió el silencio un relámpago estruendoso Llantos de niños se escuchan por la barranca Dos hombres muertos y una madre agonizaba Dos gemelitos huerfanitos se quedaban La bola negra la traían como destino Su madre herida aún así pudo alumbrarlos Un gambusino los libro de los coyotes Y así crecieron por el cendero del diablo Martin y Pedro Fierro Leyva eran sus nombres Más conocidos por los gemelos del diablo A los 20 años sus cabezas tenían precio Porque el cariño y los consejos les faltaron ♪ Martín soñó con regresar al buen camino Por el amor de una muchacha que adoraba Pedro su hermano con el diablo en las entrañas Un día domingo allá en el salto la violaba La vaca echada como que quería rumiar Martín no pudo perdonar aquel agravio Y en la barranca se escucharon dos descargas La muerte vino por los gemelos del diablo