No has cambiado nada Desde tu risa hasta tu forma de escuchar Los mismos gestos iluminando tantas frases por terminar. Dichas y angustias Como inevitables síntomas de amar Con la mirada abierta a todo Y el corazón, echó a volar. Háblame del tiempo, de las tardes, de aguacero interminable Como aquellos sueños entre tazas de café Háblame de cosas que has logrado, de lo que te ha costado Cómo pasa el tiempo; háblame. ¿Cómo ves tu vida? ¿Sentís que estás donde soñabas con estar? ¿O será que el paso de tantos años nos diluye en conformidad? Cuando cae la noche, y quedas con el tiempo para repasar Arrepentite solo de aquello que no te atreviste a probar. Háblame del tiempo...