Llevaba tiempo el fruto estando maduro Desde la tierra vio a su árbol tan lejos Vio que sus nudos iban siendo ya viejos Y sintió dentro que perdía el futuro De tronco recio, al contraluz era oscuro Y en su contorno se veía que era añejo Era ese fruto su más vivo reflejo De sus raíces el retrato más puro ♪ Al ver que se iba alzando entre ellos un muro Que le dejaba huérfano de consejo Con medias alas y el sueño desparejo Intentó un grito, más que nunca inseguro: Árbol, tú eres mi padre, no te mueras Di que aún me queda tiempo contigo Di que puedes seguir siendo mi abrigo Si alguna vez no hice lo que pidieras Si fui merecedor de tu castigo No pensé en el día en que no estuvieras Perdona que no haya sacado hojas Perdona que mi tallo siga tierno Que haya dormido a la sombra que arrojas Y que vaya a florecer en invierno Quédate aunque las tardes ya estén rojas Háblame, que el silencio será eterno Que ya sé cuál será mi manto externo: La corteza de la que te despojas ♪ Llevaba tiempo el fruto estando maduro Desde la tierra vio a su árbol tan lejos Vio que sus nudos iban siendo ya viejos Y sintió dentro que perdía el futuro