¿Para qué quiero esta vida tan infausta? Si en este mundo solo he sido desgraciado Para sufrir, Dios eterno, creo ya basta Mejor recibe cuántos pasos haya dado Mis pobres padres muchos consejos me dieron Al despedirse de este mundo engañador Yo vi sus ojos, ¡qué de lágrimas vertieron! Mas yo no sabía comprender su cruel dolor Desde mi cuna para mí ha sido tormentos Yo fui creciendo y aumentaron mis martirios Pensé en amores, pero no logré el intento Y mis palabras creo que nadie las ha oído ♪ Ay, ¡muerte ingrata!, ¿dónde estás?, ¿en dónde existes? ¿Por qué no vienes cuando un infeliz te llama? Yo bien comprendo que la muerte es para el triste En vez de ser enemiga, es fiel hermana De mis amigos con tristeza me despido Yo bien comprendo que me otorguen el perdón La bendición del Eterno es la que pido Para elevarme hasta la eterna mansión