Todos hemos sentido el frío que se esconde en la desilusión Nadie es inmune al dolor de decir adiós No podemos evitar que la vida cambie En la soledad presos de la nostalgia En esta celda gris llamada habitación Todos hemos sido víctimas de los recuerdos Amargos, lejanos... Algunos siguen aquí, algunos siguen doliendo Las aguas empiezan a fluir... El viento susurra canciones que quisimos olvidar Momentos de los cuales no podemos escapar... Los castillos que he construido también se han desvanecido Quebrantado, entre escombros Recuerdo las lecciones de mi padre Recuerdo la fuerza que me dan los míos ¡Recuerdo que sigo vivo! Nuestros corazones pueden soportar El peso de las lágrimas y cicatrices que arrastramos Hasta que dejen de latir Hasta que dejen de latir Hasta que dejen de latir Hasta que dejen de latir...