No levantes la voz, no te muevas de ahí No trates de seguir mis huellas, Me atormenta pensar que después del perdón No ha quedado ni siquiera pena, Todo el daño que un día me hiciste sentir, Hoy se ha vuelto indiferencia hacia lo que fue de ti No reconozco quién eras Condenados a mirarnos, con los ojos bien cerrados No sentimos como el fuego nos estaba quemando Solo vimos el incendio cuando había terminado Nadie quiso absolvernos, de todos nuestros pecados Entre mi cielo y tu cielo se va a gestar el paraíso terrenal Y a mis versos maltrechos voy a enterrar Que no paran de crear, puentes hacia donde no estás ¡Y yo los voy a derribar! No trates de fingir que no hay explicación si existía la intención Cada muerte ha abierto una resurrección, pero esta no era mi elección Como corroe tu risa cada decisión, Cuando está en juego la razón y nadie apuesta el corazón Y se confunde el perdedor Condenados a escucharnos con los oídos tapados Solo vimos como el tiempo nos había congelado No queríamos querernos, olvidamos recordarnos Vete tu y levanta el vuelo, que yo sigo aterrizando Entre mi cielo y tu cielo se va a gestar el paraíso terrenal Y a mis versos maltrechos voy a enterrar Que no paran de crear, puentes hacia donde no estás ¡Y yo los voy a derribar! No levantes la voz, no te muevas de ahí No trates de seguir mis huellas, Me atormenta pensar que después del perdón No ha quedado ni siquiera pena ¡Y yo los voy a derribar!