Arco del triunfo, de la paz y la palabra Sobre el silencio que se rompe y que se entabla En el idioma en que los animales hablan Cuando miran al cielo esperando que se abra Por si queda un rayo de luz en el universo O un verso que llevarse a la boca, yo sigo inmerso En el carrusel que se desliza y eriza la piel Dos manos que se encuentran bajo el mismo mantel Por escribir una canción que te rindiera honores Me vi manchando el papel con miel de flores A orillas de la luna llena Aun recuerdo aquella noche queda Cuando nos sentamos a hablar en el puerto Y estando de acuerdo no pidió siquiera Que en el invernadero siempre fuera primavera Y yo que no distingo un alma errante de un alma viajera Supe entender que la amaría La vida entera.